Hay consideraciones importantes para los ventiladores involucrados en aplicaciones donde la seguridad de los productos finales puede verse comprometida si el equipo no es sanitario. Dependiendo del proceso, hay directrices estrictas impuestas e inspeccionadas por los funcionarios federales y estatales para el procesamiento de alimentos y bebidas. Un ejemplo sería la industria láctea; en estas instalaciones de procesamiento, el crecimiento de bacterias es una gran preocupación, por lo que se realizan modificaciones en el diseño de estos ventiladores para minimizar el riesgo de contaminación.